64. Inesperado:O

Hola a todas... no puedo creer lo que les dire:

¡YA HE CUMPLIDO UN AÑO CON ESTE BLOG! El 5 de enero del 2012 fue mi 1era entrada, ahora 5 de enero de 2013.... no tengo palabras, osea... awwww :')

Gracias a todas las personas que me acompañaron en este año, por Dios llegue a 6000 mil visitas cuando pensaba que no pasaria de 100 ajajajXD no me canso de decirlo!!!

Quiero decirles que todo esto es genial y fue gracias a ustedes y gracias a Vero!!:)

Ahora si, esta historia esta al borde de terminar, triste o alegre es la realidad. les dejo este capitulo, ojala les guste. Puede que no haya habido mucha accion a lo largo del blog pero he guardadolo mejor para el "final relativo", si relativo porque aunque estoy sobreexigiendole a mi cerebro para que me de algo de inspiracion  seguir pues, no funciona del todo. Tambien he publicado en mi otro blog, pasen si tienen tiempo.

Tambien que entro a un concurso, otra vez. Este no sera de crepusculo, eso creo si no que tendre que poner en uso toda mi materia gris para crear un relato. Las invito a concursar, es una buena oportunidad:) este es el blog, y ahi vienen las bases:)

http://alec-beautiful-nightmare.blogspot.mx/ 


En fin aca les dejo el capitulo:)

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 POv. Edward

Caroline aceptaría mis disculpas quiera o no, me iba a escuchar y me dirá: “Esta bien ya te perdono”, bueno tenía que ser positivo.

-Amo las fresas – decía Caroline a una de sus amigas.

-Tu amas todo – le decía su amiga, Amelia creo que se llamaba. – sigo sin poder creer que no reprobé química, como odio esa materia – dijo para ser conversación. – tampoco puedo creer que antes creía que balancear una ecuación al tanteo era poner números al azar. – las dos se rieron.

-Yo odio al profesor – dijo Caroline, era típica charla de adolescentes. – estoy cien por ciento segura que el me detesta – dijo con seguridad.

-No hay que ser un genio para saberlo, a ti y a Ness, - ambas asintieron – recuerdo cuando explotamos el laboratorio de química – dijo riendo – fue tan divertido, casi nos expulsan pero fue divertido.

Ambas rieron, al recordarlo. No dejaría que mi hija sea compañera de ninguna de ellas en el futuro, nota mental.

-Tengo practica – dijo Amelia mirando su reloj - ¿No te molesta quedarte sola? – le pregunto.

-No. puedes irte estaré bien – le dijo.

-Nos vemos mañana, sabes… no es por nada pero deja tu tristeza por favor, me estresa que estes asi, usualmente tu eras quien me acompaña en mis momentos de depresión, se siente tan extraño estar del otro lado, mejora por favor. – esa chica decía exactamente lo que pensaba.

-Tratare, supongo. – eso no sonó como una promesa.

-Caroline, otra cosa. – la miro con seriedad. – si no quieres que nadie se de cuenta, cubrelas mejor. – señalo sus muñecas.

-No es lo que piensas… fue un acci…

-Tu y yo sabemos que no fue un accidente, no tomas unas tijeras, una navaja, un rastrillo por error, ¿o si? – le pregunto con una sonrisa de suficiencia. – no tienes ni que admitirlo frente a mi, solo te lo digo si no quieres que nadie mas se entere busques una manera de ocultarlas mejor, eso es todo. Mejor me voy antes de que la seriedad se me quede por siempre. – fingio estremecerse.

-¿Cómo te diste cuenta? ¿Confias en que no hare nada? – le pregunto atónita.

-Estas aquí, ¿no? – le respondió. – si quisieras hacerlo de nuevo, ya lo hubieras echo. No eres tonta para tomar tus decisiones sabiendo como te afectaran. La otra pregunta… bueno, digamos que no eres la primera ni la ultima, así que no te creas muy especial. Nos vemos mañana Caroline.

-Adiós… - susurro sin poder creerlo.

Cuando Amelia ya se hubo ido era mi turno de actuar. Toque a su puerta con cautela, nadie salía, volví a tocas comenzando a preocuparme nuevamente. Seguí tocando con insistencia.

-¿Por qué tocas la puerta como un loco? – me pregunto cuando la abrió.

-¿Estabas llorando? – le pregunte. Sus ojos estaban rojos. Fijo su vista en otro punto para evitar mi mirada. – eso es un si.

Me pase sin que me invitara.

-No se porque llores, pero… - la abrace en vez de seguir hablando. Lloro de nuevo.

-Soy una mala persona. – dijo con la voz rota. – yo… yo, no sé que hacer.

-Nadie te dejara sola. – le dije para consolarla. - ¿Es buen momento para pedir una disculpa? – le pregunte para desviar el tema.

-Hare una excepción esta vez. – esbozo una débil sonrisa. – gracias, y nada de esto sucedió.

-Nada. – afirme devolviéndole la sonrisa.      

 

 

POv. Reneesme

-Lucas ya quédate quieto – le decía tio Emett a mi hermano favorito – sigo pensando si en realidad no eres un hijo perdido de Eddie – se burlo.

-Yo tambien le dije eso – chocamos los cinco mientras Lucas se enfurruñaba por nuestros comentarios.

-Edward se ponía histérico si estaba mas de dos horas lejos de Bella – recordó tio Emett con humor.

Comence a reir. Venir de caza con mi familia era genial, sobre todo cuando Emett viene con nosotros.

-Ya vamos a llegar Lucas, tranquilo – tío Jazz lanzo olas de tranquilidad hacia mi hermano, seguramente a causa de su ansiedad.

-Este bien – dijo mi tía Alice palmeando su rodilla – esta con su amiga comiendo fresas. – le dijo.

-De acuerdo, gracias – le sonrió.

El ambiente ya estaba muy tranquilo, Lucas ya estaba mas tranquilo. Al llegar a casa lo primero que hizo Lucas fue llamar a Caroline, que miedo – me dije para mis adentros.

-Tengo que salir demasiado amor me va a enloquecer. – dije en voz alta y antes de que alguien me detuviera me eche a correr a través del bosque, a mi encuentro con Alec.

Corri por el bosque para encontrarnos en nuestro “lugar secreto”, me alegraba que mi papa no estuviera cerca a si evitaría que leyera mi mente. Sabia que sospechaba algo, lo que no sabía era como, estoy segura que Edward sabe algo sobre mi “relación” con Alec o por lo menos sospecha.

Me preocupo por eso luego – me dije.

Sentí que una fuerza me estrello contra un árbol de ahí en delante todo se volvió negro.

Desperté en un lugar poco iluminado, totalmente cerrado, sin puertas ni ventanas, solo había una cama en ese lugar, en donde yo estaba acostada. Solo recuerdo haber estado inconsciente, ¿Cuánto tiempo llevaría así? Empecé a pasar mis manos por las paredes buscando un punto débil sin encontrarlo, era inútil esto fue construido para no dejar salir a nadie. Me deje caer con mi espalda pegada a la pared.

¿Mi familia sabría que desaparecí? ¿Me estarían buscando? ¿Alec me estaría buscando? No quería hacer las preguntas mas importantes mi mente se negaba hacerlas.

¿Porque estoy aquí? ¿Quién me trajo?

Esas preguntas me carcomían desde que desperté. La respuesta era mas que obvia, por lo que se ellos son capaces de asesinar a sangre fría, sin corazón, sin tentarse como lo hicieron con la amiga de Caroline, ¿harían eso conmigo?, después de todo ellos ya me habían advertido que me querían viva o…muerta. Me estremecí por mis propios pensamientos.

No quería morir, no de esta forma, sin despedirme, sin decirle a cada uno de los integrantes de mi familia que los amo. Las lágrimas invadieron mis ojos resbalando por mis mejillas, sabia que en estos momentos debía ser fuerte pero como serlo si me sentía tan débil, tan vulnerable. Siempre he contado con mi familia para todo sin importar que, sollocé de nuevo, no importa si me ocultan cosas ¿Quién no tiene secretos?; ahora estoy sola, nadie me puede ayudar. Lo único que me queda es rezar porque mi familia venga en mi busca.

Tengo que ser fuerte y soportar, pensar frio para trazar un plan y salir de aquí, que todas las veces que hable con mi tío Jazz de tácticas militares funcionen, se pelear, puedo defenderme. ¿Soportaría? No era una sugerencia tenia que hacerlo.

La puerta se abrió a mis espaldas, trague el nudo en mi garganta.

Esto apenas comenzaba.