Cap. 6 (2T) Persecución

Hola, si estoy viva solo que algo acupada, ahora que regrese a la prepa es como... WTF! hasta olvide como se sostenia el lapiz! Les contare lo que hice en mis super vacasiones de semana santa, primero fui a un lugar, un pequeño pueblo llama "Potrero" si, es un lugar tranquilo tipo Forks pero en su version mas calida, ¡Todos se saludaban en la calle! todos se conocen en ese lugar, hasta una se siente rara. bueno aqui les dejo unas fotos:)

 Hay que aprovechar este tipo de ratos libres para estar con la familia, la de atras es mi tia, ella me estaba dando puche:P 
Saque la niña que llevo dentro 

De izquierda a derecha empezando por la de blanco: 
Kristi (prima), la niña de pantalon verde Caro (mi hermana) La que esta medio agachada Praxy (prima) la niña de blusa fucsia Kelly (amiguita) de otro lado de la red, estoy yo la de blusa naranja, el novio de mi prima (el que traia la pelota) se llama Ricardo y por ultimo mi prima Yunuen:)

 Aqui estoy yo de nuevo en el columpio, no vayan a creer que me despeine y mi sonrisa super genial (no me gusta pero que mas le hago)

Nunca es mal momento para el cheerleading, me parecio un buen escenario para hacer el escorpion:) no pude resistirlo.

Pues de izquierda a derecha de nuevo: mi hermana la de pantalon verde, la de lente mi prima la de en medio es mi tia (se llama Ana), yo:) mi prima Kristi y la niña Kelly.

 Mi prima y yo en un juego, gritamos mucho hasta quedar afonicas, no les miento ya me andaba saliendo del juego:)

 Es la vista del cerro, esta super cerquitas es una vista que vale la pena retratar, esta muy bonito.

eso es todo, ahora si la entrada espero les guste el capitulo:) 

-*-*-*-*-*-**-

¿Cuál fue la respuesta de Edward? “No tientes a la suerte Reneesme, aún existe el riesgo de que vuelvan”, simplemente genial. Traducción: No iras. Alec estaría de viaje, aunque esa idea no me agradara por varias razones, Aro podría ver todo lo que ha sucedido con nosotros. Algo horrible en todos los sentidos.

Asi que aquí estoy, viernes por la tarde observando como todas las personas pasan a través de los cristales del auto. Justo ahora se les ocurrió salir como la familia en feliz – y frecuentemente en peligro – que somos. Suspire, no me dejan salir a una inocente fiesta y todavía me llevan a un… donde sea que vayamos. Mi celular empezó a sonar, mire la pantalla era Mary, respondi de inmediato.

-¿Cómo esta la fiesta? – fue lo primero que dije al atender.

-Aun no llego, no se porque Matt justo ahora conduce a menos de 50km/h. – se quejo, ella por lo menos ira. – Algo me dice que no quiere que llegue. – solto una risa.

-Por lo menos sabes que llegaras. – gemi en mi mente, ya quisiera yo que me dejaran ir aunque tuviera que conducir a esa velocidad. – No me vayas a contar LO BIEN que se la pasaran.

-¿No te dejaron ir? – me pregunto esperanzada.

-Que esperanzas. – bufe, ganándome la mirada de Edward por el retrovisor.

-A ti no te dejan ir, mientras que a mi prácticamente me obligan, que ironica situacion. – medito en voz alta. – Hay Ness, que te puedo decir… mañana veras las fotos de todos haciendo cosas que sobrios jamas harian, incluyéndome. Imagínate como es Amelia sin una gota de alcohol en su organismo, ya te imaginaras cuando hacen la competencia de haber quien puede con mas tequila. No quieres saber el resultado.

-Si lo quiero saber. – hice un puchero. - ¡Aghhh! Quiero ir.

-Creeme, habrá muchas fiestas como esta. – aseguro. De fondo se escuchaba la radio, seguro Matt la encendio. – Al fin acelero, juro que una tortuga nos rebasaría.

Me tuve que reir, se que a Matt le fascina la velocidad.

-Espera Ness, Matt quiere hablarte.

-Pasamelo. – frunci el ceño, ¿para que querria hablar conmigo?

-Ness, necesito que vengan estoy por llegar al desembocadero de la carretera, hacia el kilometro 47. – me dijo con tranquilidad, respire profundo alguien los estaba siguiendo. Usaba ese tono, no queria asustar a Mary, ¡Mary corria peligro! Papa dio vuelta en “U” derrapándose en el camino; mientras Matt hablaba las indicaciones. – Traten de llegar lo mas rápido posible, no se cuanto pueda aguantar.

Edward piso a fondo el acelerador. Mama marcaba a la familia para que estuvieran alertas, Jasper y Emett iban en camino. Lucas estaba en casa de Caroline, entre los dos protegerían a Agatha si llegara a ser necesario. Por primera vez no me burle de la velocidad que Edward siempre usa.

Pensar que hace menos de cinco minutos refunfuñaba acerca de la fiesta y ahora andábamos tras una de las invitadas para salvarle, tome mucho aire y lo solte lentamente, esto ya era ir demasiado lejos.

¿Si les pasaba algo? ¿Si le pasaba algo a Mary? ¿Cómo lo explicaríamos? ¿Sabría la verdad? ¿Se alejaría?

-Ness, deja de pensar confía en que llegaremos a tiempo. – la voz de mama me saco de mis pensamientos, ¿ella no lee mentes, verdad? Siempre me descubre.

-Ya falta poco. – aviso papa. Entrecerrando los ojos. – Bella cuida a Ness, ambas quédense en el auto, escucho a alguien… - si los seguían, mis temores se confirmaron.

El auto de Matt estaba volcado sobre el lindero del bosque, ellos… no, no pueden estar…

-No me quedare aquí, ¡Mi amiga esta afuera! Tengo que ir. – exclame, salitando fuera del auto 

– Me quedare cerca de ti, por favor déjame ir.

-Esto no es un paseo al parque Reneesme. – me recordó fríamente.

-No es momento de discusiones, iremos los tres y no nos separaremos. – asentimos a las papabras de mama, tiene razón. – somos mas vulnerables si estamos separados. – hablo mientras corríamos al interior del bosque que bosque que bordeaba la carretera.

-Les has puesto atención a Jasper. – observo papa, fascinado como siempre.

-Siempre. – sonrió mama.

Me detuve en seco, el olor a sangre me aturdio un poco, la garganta me ardio. No era cualquier sangre, era la de Mary.

-Está herida. – dije en voz alta mirando a mis padres. – hay que encontrarla…

Ni siquiera lo pense y comencé a correr guiándome por el olor, mis papas no tardaron en seguirme, luego me costaría un regaño pero no seria ahora.

Observe la luna, estaba llena eso solo queria decir una cosa, veria a un gran lobo en medio de esto. los gruñidos no se hicieron esperar, resonaron en la oscuridad y el silencio que hubo hasta ahora.

-Son mas de lo que crei. – dijo papa en voz alta, esto no era bueno.

Cai al suelo estrepitosamente, uno de esos encapuchados me tiro con todas sus fuerzas. Traía una daga como la de Caroline, afilada y letal; creo que aun no me han olvidado.

-Eres tu. – dijo mirando, intuí una sonrisa diabólica en su voz. – No debería matarte, pero creo que hare una excepción…

-Yo no debería matarte pero tambien lo hare. – dijo mama antes de acestarle  una patada que lo estrello contra un árbol haciendo que este crujiera. – ¿Estas bien?

Asentí y me levante para seguir corriendo. Si algo salía mal, no me lo perdonaría nunca. Veía a 

Matt luchar con dos de esos encapuchados pero no veía a Mary por ningún lado.

-No te separes de nosotros Reneesme. – me advirtió Edward cuando esos tipos se nos acercaban. – No te vas a acercar a mi familia. – supongo que uno de ellos pensó algo que no le agrado.

Estos últimos días hemos tenido mas batallas que en mis diecisiete años de vida. Mis padres se movían tan sincronizadamente solo se veian borrones, yo estaba cerca de ellos como prometi hasta que uno de los enemigos me ataco arrastrándome lejos, no era el, era ella. Una mujer, no veía su rostro estaba cubierto; bueno estabamos en igualdad de condiciones. Me la quite de encima de una patada, aventándola lejos de mi. no queria hacerle daño a nadie, si quedaba inconciente por mi estaría bien. Alguien me agarro por detrás y esa chica volvia a levantarse, esto ya no me gusto, seguro que me golpearía. Respira Reneesme, recuerda lo que Jazz te enseño.

Le pise el pie al tipo para zafarme, era muy grande como el tio Emett. Hablando del rey de Roma, el fue quien me lo quito de encima.

-Buen trabajo sobrina. – chocamos los cinco. – veo que aun no termina la diversión. – dijo con una gran sonrisa.

-No te separes de nosotros Nessie. – asentí a las palabras de Jazz, pero fue tarde nos cayeron más de esos cazadores de la nada.

Mis tíos tenían más experiencia en este tema, yo solo me dedicaba a esquivar los golpes y pasárselos a ellos para que se encargaran del resto.

Esa chica de nuevo vino contra mí, rodamos por el suelo colina abajo levantando polvo y haciendo que las hojas secas crujieran por nuestro peso.

-¿Qué es lo que quieren de mí? – le pregunte harta de la situación. La volví a empujar y me puse de pie, alerta a cualquier ataque.

No me respondió, solo me miro a través del esa franja que dejaba entrever sus ojos. Yo no deseaba dañarle, pero por lo visto ella sí, desenfundo su daga dando un leve destello al filo. Trague el nudo a mi garganta, solo estábamos ella y yo.

Y una no saldría.        

Ella ataco primero, esquivaba sus golpes esperando no hacer uso de las lecciones de tío Jazz. Era fuerte, rápida pero yo era medio vampiro, eso cuenta para algo ¿no? Siempre reprimo mi fuerza, mis instintos por temor, ahora tendría que dejarlos salir si no quería morir aquí. La tacle con todas mis fuerzas dejándola sin respiración, tumbada boca abajo.

-Esto puede terminar, solo dime que quieren. – me senté con una pierna a cada lado de su espalda para inmovilizarla. – Juro que mi familia no te hará daño.

Uso su peso y me aprisiono. Tampoco dijo nada esta vez, solo eso: miraba.

Presiono la daga en mi corazón, si me movía estaba segura que me atravesaría como un trozo de mantequilla, sino… de todas maneras ella se encargaría de atravesarme. 

-Lo siento. – lo dijo tan bajo que no estaba segura de sí en realidad dijo eso.

Zafe uno de mis brazos, para decirle mis últimas palabras.

-Yo más. – le dije a través de mi don.

Salió disparada hacia atrás por la patada que le di, aprovechándome de su momento de impresión.

Me levante lentamente, su corazón aun latía, suspire aliviada está viva. Tenia que saber quién era, según Caroline ellos no se tentaban el corazón pero ella me pidió disculpas justo cuando iba a matarme, algo me orillo a quitarle la esa mascara para revelar su identidad, necesitaba saber a quien me enfrente.

Con cuidado fui retirando la capucha desde el borde, en la base del cuello hacia arriba, iba revelando una piel palida, y cuando la retire completamente me quede boquiabierta al ver de quien se trataba.