Estuve revisando mis corres y mis blogs y unas chias que acaban de empezar con el suyo me han pedido ayuda para darle un poco de promocion, quizas tambien se hayan pasado por los suyos, entren porque no se arrepentiran, ya llevan dos entradas y la verdad que estan geniales!!!
Miren este es el blog:
"Lo que las chicas quieren", hablaran de temas, daran consejos, responderan preguntas, tips, tutoriales y todo eso... si dan clic en el nombre y las siguen les aseguro que ellas los/las amaran! Son 5 chicas, esperemos que se caigan bien:)
Bueno, una de ellas tambien tiene otro blog, ya no me dio tiempo de publicarlo en mi otro blog pero aqui se los dejo:)
MagliiBlog's, si le dan clic podran ir a su blog, no se arrepentiran, hablo sobre tips y todo eso, por mi parte ya la sigo:)
Ahora otra noticia importante, TENGO TWITTER!! si, yo a la que no les gusta y que sigue muy bien sin saber usarlo lo tiene, si tienen twitter me siguen? y tambien yo las seguire, ya se que algunas de ustedes si tienen pero la verdad no he tenido ningun chance para pasarme por sus blogs:( solo a algunos y la verdad ni he comentado, regañenme por eso!:( Mi twitter es MeelyHDZ95.
Ahora si el capitulo, ojala les guste, y pasense por los blogs y sacaran mil y un sonrisas!:)
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Alec había pasado por mí como me dijo
papa, eso me puso de mejor humor.
-¿A dónde quieres ir? – me pregunto
mientras encendía el auto.
-Quiero salir de aquí, hace días que
necesito un poco de ciudad.
-Como órdenes. – acelero. - ¿Te
sucedió algo hoy?
-La profesora me propuso junto con
otras chicas para un nuevo recital. – le conté, esa es la parte menos mala. –
harán El lago de los cisnes, la
odiosa de Lucy nos insultó a Mary y a mí, no soporte que nos hablara de esa
manera y le dije unas cuantas cosas.
-¿Qué le dijiste exactamente? – me
pregunto medio sonriendo.
-En pocas palabras que soy mejor que
ella. – soltó la carcajada, una hermosa carcajada. – no te burles, mi intención
solo era que dejara de hablar, si no pensaba ir a la audición mi plan se fue a
la basura, tendré que ir para salvar mi honor.
-¿Por qué no quieres audicionar?
Ganarías hasta con los ojos cerrados. – observo quitando la vista del camino
para mirarme.
-Es por precisamente. – me pase la
mano por el cabello. – hay chicas que lo hacen con tanta alegría y entrega, que
no puedo llegar a quitarles eso.
-Tú también te has esforzado mucho, me
mostraste tus clases con Alice y vaya que era exigente contigo siendo su sobrina.
– recuerdo como insistió tanto esa vez para que se lo mostrara, que termine
cediendo, gane que me dijera que me veía adorable e inocente cuando era más
pequeña. – te mereces tanto como ellas ese lugar, no te menosprecies.
-Supongo que tienes razón, gracias por
escucharme.
-Cuando quieras, además me divirtió lo
de Lucy, nunca me ha agrado la prima de Caroline.
-Dice que antes se llevaban bien,
supongo que después de ese incidente ya no fue así eso fue lo que le hizo creer. – explique.
-Caroline es demasiado comprensiva y
tolerante respecto a su prima, le hizo un gran favor sin que ella sepa nada. –
asentí.
Hacerla olvidar un trauma como ese
cualquiera se lo agradecería.
-Ya llegamos, ¿Qué quieres hacer? –
que rápido llegamos.
-Quiero… - me quede pensativa. – no sé,
creo que venir aquí fue una excusa para salir un rato de mi casa, mis padres
han estado demasiado sobreprotectores.
-Compréndelos, les da miedo perderte
tanto como a mí. – suspire, tiene toda la razón. - ¿Qué te parece si te llevo a
tomar un chocolate? Sé que eres adicta a él.
-Eso me encantaría. – dije sonriendo
anticipadamente, adoro el chocolate. – por eso te quiero, por malcriarme tanto.
– le di un rápido beso en los labios mientras conducía, si fuera un humano ya
habríamos chocado.
-Te voy a malcriar más seguido. – dijo
manteniendo su vista al frente sin quitar la sonrisa.
Estaciono el auto en donde
compraríamos mi chocolate, una cafetería muy al estilo de los años cincuenta;
había una especie de aparato que reproducía música, los meseros y meseras iban
vestidos con la ropa de ese entonces, muy al estilo Vaselina. Todo el ambiente era muy alegre, los pisos blanco y negro
contrastaban con la iluminación y el diseño de las paredes, sonreí esto es
justo lo que necesito. Nos sentamos en una mesa vacía para que pudiera ordenar
algo.
-¿Qué desean ordenar? – nos preguntó
el mesero, creo que Alec se puso celoso es fácil de deducirlo por la forma en
que lo miro.
-Hummm… - mire la carta para saber que
elegir. – la malteada de chocolate, con doble chocolate por favor. – pedí con
una sonrisa.
-¿Algo más? – pregunto anotándolo en
su libreta.
-Nada más, gracias. – lo que dijo mi
dulce novio sonó mas como: “Vete antes de que te arranque la cabeza”.
El chico se fue con su corazón acelerado.
-Si el mesero sufre un paro cardiaco tendrás
eso en tu conciencia. – bromee mirando a Alec. – no tienes que estar celoso,
estoy contigo.
-Eso no se me puede olvidar. – aseguro
recuperando su sonrisa. – no puedo evitar ponerme celoso, más ahora que empiezo
a descubrir cómo se siente.
-¿Nunca has tenido novia? – le
pregunte con cierta sorpresa, porque si bien Caroline y Lucas me han contado
algo sobre su “antigua vida”, aun tenia algunas dudas. – algo más formal.
-No. – negó con la cabeza. – creo que
algo sabes sobre que nunca me he tomado las cosas en serio, una simple aventura
de una noche, como dirían y… hasta ahí. – me confeso bajando la mirada. – tú
has sido la razón de que eso haya cambiado.
-¿Tus dotes de seductor están
fallando? – le tome el pelo.
-Contigo si, al principio. – ambos reímos,
como nos encanta recordar eso. – me has enseñado muchas
cosas, había olvidado
lo que es que alguien se preocupe por mí.
-Me alegro de no llevar la cuenta de
todas las personas a las que he ayudado. – dije en tono jocoso. – ahí viene mi
malteada. – dije cuando el chico salió
de la cocina con mi pedido, me lo entrego con rapidez y se fue, enarque una
ceja en dirección a Alec solo se encogió de hombros sin quitar su sonrisa. –
sabe delicioso, soy una choco adicta.
-Se nota. – observo cuando le di un
sorbo a mi malteada. – Esta cafetería, para algunos los cincuenta fueron buenas
épocas.
-¿El estilo es igual que en esa
década? – le pregunte con curiosidad, era una buena manera de sacar algo de
información, a veces me evita en estos temas y no me molesta porque sé que
fueron épocas no tan buenas para él, pero aun así sigue dándome curiosidad.
-Algo así. – me respondió. – no es que
saliera mucho para conocer, a pesar de todo la gente vestía diferente, una vez
Jane perdió una apuesta tuvo que usar falda, detesta las faldas. – me conto,
trate de imaginármela me reí. Tengo que recordarme no reírme frente a ella de
esto. – tampoco me importaba lo que sucediera afuera, conocía fuera del
castillo pero me daba igual, siempre vi a los humanos como una raza inferior y
vulnerable, un gran error. Bella es un gran ejemplo, enfrentar a los “tres
grandes” sabiendo que podía morir no lo hace ni la guardia.
-¿Mama los enfrento? – pregunte
sorprendida. Le di un sorbo a mi refresco, aun no llegan a esa parte de la
historia. - ¿Cuándo fue eso?
-Hace años, tu madre aún era humana
cuando eso sucedió; - eso prácticamente podía llamarse suicidio. – lo recuerdo
perfectamente, esa vez Edward dio pelea; de todos modos no gano.
-¿A qué te refieres? – le pregunte.
-Ya he dicho demasiado, tus padres me
mataran si te cuento más. – batí mis pestañas coquetamente
acercándome a él,
luego puse la cara de perro triste nunca falla. – eres imposible, si muero será
por tu culpa.
-Mi papa no lo haría, sabe que me
haces feliz y si acabara contigo me haría infeliz. – le dije con seguridad.
-Confiare en ti. – dijo seguro. –
Estaba muy mal alimentado, Edward; a pesar de que Aro le ofreció un lugar en la
guardia lo rechazo y prefirió seguir su plan, eso sí que no te contare nada. –
bueno, lo dejaría ganar por ahora. – Bella y Alice llegaron para impedirlo,
para tu madre solo había dos opciones: morir o convertirse, sabía demasiado. –
asentí, algo así me imagine conforme me lo contara. – el don de Jane no le
afecto, así que como Aro vio en ella un gran potencial decidió concederle la
oportunidad de convertirse. Edward nunca lo quiso así, pero no le quedo de otra
que aceptar.
-Vaya, si la vida de mis padres
alguien la escribiera definitivamente que sería un best-seller, ¿no lo crees? – asintió riendo, no lo decía en broma
bien puede suceder. – otra cosa más. – me miro con cara de por favor ya no me
pidas que te cuente más. - ¿Sabes bailar al estilo de los cincuenta? – sonreí,
la canción que sonaba me gusta.
-No, de ninguna manera, no, no y no
bailare. – se negó rotundamente.
-Vamos Alec, no será tan malo. – me
levante de mi asiento para animarlo. – puedo armar un escándalo para que bailes
esta pieza conmigo, tú decides por las buenas o las malas.
-Eres mi peor pesadilla. – se levantó
con pereza. – creo que el amor te provoca hacer muchas cosas. – me susurro al
oído.
Me sonroje, si supiera lo que te hace
ser el amor.
No me esperaba que Alec me balanceara
de un lado a otro como en las películas, tiene como característica la gracia de
todo vampiro entonces, ¿Por qué lo encontraba tan diferente? Lo siguiente que
sentí fueron sus labios, fui consciente de donde estábamos cuando oí aplausos,
interrumpieron nuestro beso. Las personas de la cafetería nos miraban, algunos
murmuran cosas como: “qué bonita pareja” “los dos son tan guapos” y
otras cosas
que no quiero mencionar mejor.
-Tenemos algo pendiente. – me dijo
cuando salíamos de la cafetería.
Antes de que terminara la frase ya
había rodeado su cuello con mis brazos para continuar con el beso.
-Tus padres me mataran si no te llevo
a tiempo a tu casa.
Me reí, a veces me pregunto si en
realidad les teme a mis padres, digo perteneció a la guardia Vulturi por unos
tres siglos, y mis padres bueno, son mis padres.
Alec es un cosi definitivamente c:
ResponderEliminarkjsafkjsfkjsafjnfd♥
ResponderEliminarDivinos! Me encanto este capítulo!
Alec es tan ajfaflksjflksajfd♥ pero que no asuste así a los camareros! Quiero ir a esa cafetería!!!!