Hola de nuevo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Sigo con toneladas de trabajos finales, tengo seis materias ya entregue uno me faltan cinco jajaja XD suele suceder! Pero ya vengo aqui con otro capitulo, que espero les guste.
¿Ustedes que cuentan? jajaja lo se es que ahora no tengo mucho que escribir... ahhhh!!! si, ya me acorde lei otro libro se llama "Los ojos de mi princesa 2: Fuerte por amor" con la primera parte me quede jfwfhlwehfñjwehfh y con segunda fue como jfoqwherhfiweohfrpoewh pero esta muy bonito lo recomiendo:')
Vengo rapidin porque todavia tengo que acabar mi ensayo sobre el idioma Francés :/ osea soy malisima en los idiomas, pero ya que!
MMM... otra cosa, la primera parte narrada por Reneesme esta a punto de acabar un par de capitulos mas a lo mucho, la segunda parte sera narrada por Caroline y tengo pensado algunas cosillas que ayudaran a entender las cosas mejor porque si estara medio revuelto!:O Tambien que no he tenido nada de tiempo de pasarme por sus blogs, pero juro que ya lo hare.
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Mi hermano estaba sentado en piso del corredor afuera de
su puerta esperando que su novia saliera, no quería causarle más disgustos.
La puerta se abrió en un chirrido, Caroline estaba parada
ahí sin decir nada solo miraba el piso retorciendo sus dedos en un gesto
nervioso.
-Lo siento. – susurro quebradamente.
-Me tenías muy preocupado. – se acercó a ella, no sin
cierta vacilación y le tendió la mano.
La revelación de Lucy aun me rondaba la cabeza, me
suplico que no le contara nada para no crearle falsas esperanzas, esa
posibilidad podría significar el inicio o el fin de la guerra. Caroline cree
que sus padres murieron en un incendio, pero si es cierto que por lo menos su
madre está viva, eso quiere decir que su padre también podría estar… entonces,
si eso es cierto sus padres también pueden creer que ella está muerta. Esto
parece una telenovela, y muy buena cabe decir. Tengo que hablar con mis padres
o con tía Rose, incluso no dudaría que ya saben algo.
Mi celular comenzó a timbrar, en la pantalla venia el número
de Alec; ya es hora de que le responda.
-Alec. – conteste la llamada.
-Hasta
que al fin contestas Reneesme. – fue un alivio oír su voz, aunque sea por
teléfono. – Cuando dejaste ese mensaje te marque y, ¿Qué hiciste? Colgarme,
creo que debí esperar más para llamarte.
-Lo lamento papa, pero… todavía estaba algo molesta por
la discusión que tuvimos antes de que viniera aquí. – le recordé con sorna. –
Te quiero mucho Alec, pero lo de sobreprotector déjaselo a Edward.
-Por
un momento creí que estarías furiosa conmigo. – soltó una risa.
-No, ya no. – suspire a mi pesar, el enojo se me paso tan
rápido como vino. – Te extraño demasiado. – me recargue en el barandal. – mejor
cuéntame cómo les ha ido a ti y a Jane, a mí tampoco me agrada que estés en ese
lugar.
-No
hay muchas cosas nuevas que contar. – sonó aburrido. – a menos que quieras
hablar de decoración, quizás te interese saber que cambiaron el gris por el
negro.
Solté un bufido, seguro que sí.
-Aun así Aro está
muy raro.
-¿Raro?
-Bueno,
más raro de lo normal. - explico ante mi
burla. – La semana que entra nos reuniremos con tu familia, espero que verte
ahí.
-Lo dudo, creo que nunca descubriremos todos los secretos
de este lugar. – observe el cielo oscuro, lleno de estrellas. – Es tranquilo,
me gusta. Aun así creo que todavía faltan otras cosillas por resolver antes de
regresar.
-Ya
quiero verte, linda. – me sonroje, esto quiere decir que todo está bien. – Te
extraño demasiado.
-Yo te extraño más, pero tengo que colgar algunas
personas necesitamos descansar. – suprimí un bostezo. – te quiero Alec.
-Descansa
Nessie, yo también te quiero. – colgué.
Sonreí al cielo, ahora si podía descansar sabiendo que
Alec estaba bien.
-Ness, será mejor que entres Caroline quiere contarnos
algo. – me aviso Anne sacándome de mi ensoñación.
-Claro. – la seguí dentro de la casa, a su pequeña sala.
- ¿Y Maggie? – pregunte al no verla bailoteando por ahí.
-Fue a pasar estas dos semanas con sus tíos, siempre se
va en estas fechas. – me conto con un poco de tristeza. Asentí.
A mitad de la sala estaba Caroline observando el libro en
la mesilla de centro.
-Primero… lamento todo eso de no querer ver a nadie y la
autocompasión, perdón por preocuparlos de esa manera. – se disculpó mi amiga.
-Olvídalo de una buena vez, quizás con un golpe puedas
lograrlo considéralo es una oferta que no estará vigente por mucho tiempo. – ofreció
Lucy, ha sido muy bromista desde que regreso a ser ella.
-Lo tomare en cuenta. – sonrió su prima. – Pero creo que
Ness y Lucas se han preguntado para que queríamos ese mapa, bueno pues no era
un mapa en si, lo que realmente importaba era lo que tenía escrito.
-¿Algo así como una clave? – pregunte.
-Parecido. – contesto Lucy. – Había algunas palabras
ocultas, entre Caroline y yo las descubrimos, y por eso fuimos a ese lugar,
aunque sinceramente yo ya sabía que teníamos
que ir allí. – le lanzo a su prima
una mirada que no supe interpretar.
-Continuando con el tema, este diario es más que eso. –
señalo al libro de tapa azul que tenía en sus manos. – Este es el libro de
hechizos del que les conte, Elena lo disfrazo de su diario y lo oculto.
-Cuando se perdió no me imagine que estuviera en ese
lugar. – comento Anne.
-Yo si, pero no me atrevía a entrar. – bajo la mirada. –
Dejo unas cartas, para todos. – cogió los sobres que sobresalían por debajo del
encuadernado. – Esta es tuya Anne. – le tendió el sobre teñido de amarillo,
decolorado por el tiempo. – Para Maggie, también para ti Lucy, Matt y para mí.
– dejo los sobres de ella y Matt encima del libro. – Luego se la entregó a
Matt.
-Si tenemos esto podríamos negociar o algo por el estilo,
estoy segura que alguien lo quiere para hacer un hechizo fuerte. – frunció el
ceño hacia el libro. – Si fuera por mí lo quemaría.
-Podríamos hacerlo, hace mucho que no bailo alrededor del
fuego. – observo Lucy torciendo el gesto. – ya sabes, lo normal.
-Claro, lo normal. – dijo Caroline con desinterés. – Al
parecer nuestra misión aquí ha terminado.
-Me alegro, necesito civilización. – murmuro Lucy. – Creo
que deberíamos salir, ya saben, divertirnos…
-Estoy de acuerdo. – secunde a Lucy. – Ha pasado tanto,
que sinceramente creo que debemos olvidarnos un poco de esto. Algo de diversión
no nos vendrían mal.
-No me importaría ir con ustedes. – apoyo Anne con una
débil sonrisa. – Hace tiempo que no salgo.
-Anda, Caro, una salida normal. Sin problemas, nada sobrenatural
o de criaturas míticas, solo tú, yo y otras tres chicas, bailando. – accedió
Lucas.
-De acuerdo, creo que perdí. – cedió mi amiga al fin.