Cap. 15 (2T)

Regrese!!!!!!!! Oh sipirili, desde hace unos dias que estoy de vuelta, ojala aun me recuerden:)

Les traigo otro capitulo que ojala les guste, y espero ponerme al corriente con sus blogs, porque en estos dias no me doy abasto, me tomo un momento para hacerles una pregunta... Bueno, es mas como un mini encuesta y la colgare al costadito --------> por fis ayudenme con esto, sepan que estan ayudando con una tarea de la facultad:P 

les quiero contar unas cosas de esta historia, como ya dije pronto llegara a su fin... lo he tenido en mente desde que empece esta temporada, no se si hacer un epilogo individual para cada seccion o uno en conjunto!? esa es mi duda existencial en estos momentos, bueno tambien tengo otra duda que desde hace dias me trae con el Jesus en la boca ;) 

¿PORQUE RAYOS NO ESTAN TRADUCIENDO LA SEGUNDA PARTE DE TRONO DE CRISTAL?!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! 

Es un libro super genial y super recomendado, es diferente, tiene una propuesta fresca... pff... ya lo veremos, aunque lo tenga que traducir yo misma lo leere jajajaXD Bueno, en este blog traen una propuesta muy buena, buscan traductoras, a lo mejor no hay paga pero para las personas que les gusta el ingles y todo eso es una muy buena oportunidad:) 

El mundo de Melody 

dense el tiempo de pasar y revisenlo, please!! :) 

Ahora si les dejo el capitulo!!!

-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Cuando dices que las cosas no pueden estar peor, solo asegúrate de que sea cierto. Ya han pasado dos días y Caroline sigue en el mismo estado, no quiere que nadie se le acerque. Ni Anne, ni Lucas o Lucy, mucho menos yo. Esto ya es demasiado.

-Es duro, ¿no crees? – me pregunto Lucy recargándose junto a mi en la baranda del patio trasero. – Cuando crees que nada mas puede derrumbarte, de la nada caes.

-Me pregunto si realmente es así de duro. – murmure.

-Mi prima siempre ha sabido ocultar sus sentimientos a la perfección, es una actriz consumada. – sonrió tristemente. – quisiera creer que solo nos está engañando.

-¿No hay nada que puedas hacer por ella?

-Mis poderes no son ni la mitad de poderosos que los de Caroline. – me observo midiendo mi reacción. – Se desarrollaron hace poco.

-¿No ocurre a los siete? – pregunte curiosa. – Caroline nos explicó algo…

-Ven. – tiro de mi mano, nos dirigíamos al bosque.

-¿A dónde vamos? – pregunte antes de alarmarme.

-A donde crees. – señalo el bosque con sarcasmo. – hay algo que debes saber. 

Me condujo al interior del bosque por un camino poco definido pero marcado lo suficiente para no perderse.

-Aquí nos reunimos Caroline, Elena y yo cuando éramos niñas y hasta hace unos pocos años seguíamos haciéndolo. – señalo el pequeño prado, un árbol enorme bridaba sombra, una especie de protección. – cuando todo eso paso, me pregunte mil veces porque sucedió aquí, justo en este lugar donde nunca ocurría nada.

Paso sus dedos por la corteza del árbol, las iniciales “R”, “E” y “L” grabadas en esta.

-Hasta el día de hoy pude comprenderlo. – se giró para mirarme. – Supongo que Caroline te conto la historia de lo que sucedió aquí hace unos siglos y lo que nos ocurrió a nosotras.

Asentí sin palabras.

-Mis poderes son de rango menor, eso es lo que mi prima no sabe. Cuando cumpla dieciocho se desarrollaran por completo, como los de ella.

-Eso quiere decir que Caroline será más poderosa. – asumí.

Asintió su prima.

-Bueno, pues en el poco tiempo que llevo en la Organización. – cuando decía organización supe que se refería a los cazadores. – me entere que había acuerdos, cuando te secuestraron y lograron rescatarte, no te querían para nada mas que un intercambio.

-¿Qué?

-A quién quieren realmente es a Caroline, no se para qué. – asentí, lo sabía siempre se había tratado de ella. – no podemos dañarnos entre nosotros, está prohibido, por eso te necesitan eres su pase seguro para tenerla de vuelta.

-Soy una ficha más en su tablero. – reflexione en voz alta.

-Ella es muy poderosa, podrían ser prácticamente invencibles. – hablo Lucy. – no encuentro otra razón para que la quieran con tanto entusiasmo.

-Debe haber algo más. – rebatí. – Dudo que sea solo por eso, también pudieron haberla secuestrado pero no fue así, hay algo aquí que no cuadra.

-También pensé eso, pero no sé qué pueda ser. Además… - Lucy se quedó callada como si repentinamente fuera hablar de más. – Creo que tienes que saber esto, alguien tiene que saberlo por si pasa algo. – sonrió pero no le llego a los ojos.  

-No digas eso…

-Hay una posibilidad de que la madre de Caroline este viva.  

Tenía que hablar con Caroline, ahora o nunca. Abrí la puerta de la habitación de Lucas sin tocar, aquí ha estado mi amiga desde que la rescatamos de esa catacumba; ya estaba harta de verla en ese estado.

-¿Rose? – la llame por el nombre que solía usar antes.

No hubo respuesta.

La cama estaba ocupada por una Caroline hecha un ovillo en el centro de esta, el cabello le cubría la cara pero las ojeras debajo de sus ojos eran visibles a pesar de la oscuridad en la habitación, sus ojos cerrados como si estuviera durmiendo, sin embargo, su respiración me decía lo contrario. El sandwhich que Anne había dejado esta tarde en el buro seguía intacto, no había comido nada. Me senté en la orilla de la cama, hundiendo ese lado con mi peso.

-Ya sé que estas despierta, no finjas conmigo. – le dije en voz alta.

-Vete. – dijo sin abrir los ojos, su voz sonó rasposa.

-No lo hare. – dije con tranquilidad. – Lamento no hacer tu voluntad… - solté son sarcasmo. – pero hablaremos quieras o no.

-No quiero. – se volteo para ignorarme, por lo menos no había gritado como histérica. – No 

estoy loca, ahora vete quiero estar sola, como siempre. – soltó con amargura.

Estoy acostumbrada a que papa lea mi mente, pero es extraño que otra persona pueda hacerlo.

-No estás sola. – replique al instante en que ella dijo esas palabras. – a veces cuesta verlo, pero no lo estas. – intente poner una mano en su brazo pero ella se removió.

-Tú no sabes eso. – se le quebró la voz. – Siempre has tenido a tu familia unida, a tu lado mientras que yo… la mia se fue rompiendo poco a poco.

Suspire. Esto no es lo que me espere, había tanto resentimiento en sus palabras.

-Cuando Lucas me encontró desangrándome aquella vez, solo pensaba en aliviar el dolor, olvidarme de todos para poder estar con mi hermano. Por lo menos sé que sería feliz con él. – olía a sal, estaba llorando. – Fue el primero en irse, luego siguieron George y Jenna, después Elena… tengo miedo de quien será después.

Me limpie las lágrimas que escaparon de mis ojos, comprendía algunas cosas pero no podía estar de acuerdo.

-Las personas importantes en mi vida se han ido, siempre se van.

-Yo no me iré, ni Lucas, ni ningún otro Cullen aunque nos echaras a patadas, jamás nos iríamos. – le asegure con vehemencia. – Lamento lo que te sucedió, eras prácticamente una niña, pero dicen que lo que no te mata te fortalece pues eso sucedió contigo.

-No puedes saberlo. – susurro.

-Por supuesto que puedo. – me puse de pie. – Tú fuiste quien me salvo en aquella fiesta, decidiste irte para mantenernos alejados del peligro, te atravesaste para que esa daga no me diera a mi estuviste a punto de morir a causa de eso, y todavía me dices que no lo puedo saber. – dije con exasperación. – Yo podre ser ingenua y torpe a veces, seré impulsiva hasta el cansancio pero si de algo estoy segura es que… Si yo no te hubiera conocido, jamás habría salido de ese pozo que yo misma excave.

-Lo habrias hecho, tarde o temprano. – murmuro.

-A veces olvido lo exasperante que eres. – me deje caer a su lado en la cama. – No se qué hacer para que vuelvas a ser la misma de antes, risueña y luchadora.

-Nada.

-No lo creo Rose, tu eres quien no quiere hacerle frente. – cerre lo ojos tomando una aspiración profunda.

-Rose se fue hace mucho tiempo. – murmuro sorbiendo por la nariz.

-Que bien, porque yo no quiero a Rose. – me levante de la cama. – Quiero a mi amiga 

Caroline.